Desde nuestra llegada pudimos dar cuenta de la calidad del lugar pues Mónica, la recepcionista ya nos esperaba en la entrada. Con una gran sonrisa en el rostro, nos recibió de forma muy calurosa y haciéndonos sentir como en casa desde el primer momento.

Mónica nos dejó absorver la belleza del lugar mientras nos daba la bienvenida e inmediatamente nos llevó con Antonio Arelle Barquet, uno de los dos dueños de hotel Casa del Atrio, quien a su vez también ya esperaba nuestra llegada y nos recibió como un amigo al cual hace tiempo no veíamos y nos espera en su casa con alegre anticipación.

Con su amistosa y amable personalidad, Antonio nos dió la bienvenida y nos entregó la llave de nuestra habitación. Cada una de las doce suites es una experiencia en todos los sentidos: blancos de calidad y diseño, camas con memory-foam, regaderas de lluvia, amenidades de aromas relajantes, jabones artesanales y obras de arte que invitan a la contemplación. Ideal para vacacionar o para viajes de negocios. Las suites cuentan con pantallas de plasma con TV por cable, escritorio y lámparas de lectura, aire acondicionado, cafetera e internet WiFi gratuito.

Sin embargo, nada nos hubiera podido preparar para lo que estábamos por ver. Antonio había omitido dar algún detalle pues estamos seguros que sabe que una imagen vale más que mil palabras y que su hotel nos dejaría con la boca abierta. Pasando el grandioso salón que alberga las antigüedades, un arco nos daba la bienvenida a esta experiencia única dentro del mundo de los hoteles boutique. Ante nosotros se abrieron patios amplios y añosos que van dirigiendo a los huéspedes a sus distintas habitaciones. Cada espacio está perfectamente diseñado y decorado con un gusto y elegancia impecable. No hay un solo rincón que no tenga un detalle que sorprenda. Perfectamente pensado para agradar a los sentidos y hacer de la estancia de sus huéspedes una experiencia única, la mirada va saltando de objeto en objeto que no hace más que ir trazando un camino de estilo y distinción.

Siguiendo este camino mágico hasta nuestra habitación, llegamos a un de las suites. Una vez dentro, encontramos un hermoso libro de huéspedes que nos contaba la historia de nuestra habitación. Sin duda uno de los detalles más encantadores del hotel. En este libro a semejanza de uno de recortes, nos enteramos de lo especial que era el lugar donde estábamos.

 

Un arco, dos dragones y un hada reciben a los huéspedes antes de entrar a esta habitación. En su interior la luz se filtra a través de los tragaluces originales de los años 50 y la sensación es una atmófera íntima, personal. La intención del mobiliario es recrear las recámaras de visitas de las antiguas casonas: cómodas de laca y concha nácar, roper con espejo de cuerpo entero y un escritorio presidido por una diosa hindú.

Luego de una buena noche de descanso, al día siguiente nos dirigimos a uno de los patios en los que se pueden degustar los alimentos del desayuno. Sin duda es hermoso recibir los primeros rayos del sol en este lugar y más con la esmerada atención de Rosa y Raquel, las chicas que nos atendieron de maravilla. Con una extrema amabilidad y dispuestas a complacernos, nos recibieron con la mesa puesta.

Con varías opciones en el menú, desayunamos rodeados de la paz y tranquilidad que Casa del Atrio nos ofrecía para dentreo de un rato partir a conocer Querétaro.

De vuelta al hotel, luego de un largo día de amenidades y sopresas por el excelente estado en el que se encuentra toda la ciudad y de la amabilidad y hospitalidad de sus personas, volvimos al hotel, listos para consentirnos en una de sus secretos mejor guardados: el SPA.

La experiencia Pantry es una de las firmas de su spa. Esta es una especie de alquimia que transforma hierbas, semillas, flores, miel, té y aceites en fórmulas curativas, nutrientes y estimulantes.  Para conocer este proceso Casa del Atrio ofrece una ceremonia de bienvenida en la que se disfruta tres rituales para la abundancia y la prosperidad: lavado de manos, ritual de flores y semillas y dibujo de mandalas. Si quieres saber más sobre sus tratamientos de firma, sus masajes e hidroterapias antes de llegar e ir planeando cual de todos te quieres regalar, entra a AQUÍ.

Nosotros quedamos maravillados y super consentidos con la experiencia SPA. La atención de Georgina Jiménez Suárez fue de lo mejor y nos ayudó en todo momento explicándonos en que consistía cada uno de los tratamientos que ofrecen. Además, como todo en Casa del Atrio, el SPA es encantador y te envuelve en un ambiente místico y relajante.  ¡Lo mejor de todo, es que tienen a la venta algunos de estos producto!

VER FUENTE ORIGINAL AQUÍ